Bendito el lugar y el motivo de estar ahí
bendita la coincidencia.
Bendito el reloj, que nos puso puntual ahí
bendita sea tu presencia.
Bendito Dios por encontrarnos en el camino
y de quitarme esta soledad de mi destino.
Bendita la luz,
bendita la luz de tu mirada
bendita la luz,
bendita la luz de tu mirada
desde el alma.
Benditos ojos que me esquivaban,
simulaban desdén que me ignoraban
y de repente sostienes la mirada.
Gloria divina de esta suerte,
del buen tino,
de encontrarte justo ahí
en medio del camino.
Gloria al cielo de encontrarte ahora,
llevarte mi soledad
y coincidir en mi destino
en el mismo destino.
Bendito el reloj y bendito el lugar,
benditos tus besos cerquita del mar
Y tu mirada.
Amor amor, qué bendita tu mirada
tu mirada amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario